La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), es un padecimiento pulmonar progresivo y potencialmente mortal que puede causar disnea (sensación de falta de aire) al principio asociada al esfuerzo y que predispone a padecer exacerbaciones y enfermedades graves.
Consiste en medicamentos inhalados que dilatan los bronquios para permitir una mejor entrada de aire, sin embargo la enfermedad es progresiva y, si no se atiende de manera oportuna, el paciente podría necesitar en algún momento del mismo terapia con oxígeno las 24 horas.
Hay dos formas principales de la misma y son la Bronquitis Crónica y el Enfisema Pulmonar. La mayoría de las personas con EPOC tienen una combinación de bronquitis y enfisema pulmonar.
Los objetivos del tratamiento farmacológico son por un lado el alivio de los síntomas y la mejoría de la tolerancia al esfuerzo y del estado de salud en general, y por otro lado la prevención de la progresión de la enfermedad y reducción del riesgo de exacerbaciones y muerte.
El enfermo requiere entrenamiento para la administración de los fármacos inhalados, y una evaluación regular de la técnica inhalatoria en cada visita. Antes de intensificar el tratamiento hay que evaluar el uso correcto de los inhaladores y el cumplimiento de las recomendaciones médicas.
Para prevenir la progresión de la enfermedad, lo más importante es identificar y eliminar la exposición a los factores de riesgo sobretodo el tabaquismo, además tener en cuenta la exposición ocupacional y la exposición a la contaminación del aire ambiental. A todos los enfermos hay que recomendarles una actividad física adecuada a su estado clínico con el fin de mejorar su capacidad física y calidad de vida ya que la limitación de la actividad física, frecuente en los enfermos con EPOC, puede llevar al empeoramiento del estado de salud y a una posterior limitación de la actividad, convirtiéndose en un círculo vicioso.
Se recomienda la rehabilitación respiratoria ya reduce la intensidad de los síntomas, mejora la calidad de vida y la capacidad de enfrentar las actividades cotidianas. La vacunación contra la Influenza y neumococo reduce el riesgo de infección respiratoria baja. También se debe valorar en la consulta el uso de oxigeno suplementario y de ventilación n o invasiva según las características que presente cada paciente.